¡Qué placer, Negro! El que inventó esto no sufrió la derrota que tiene la infancia frente a la cultura social, cuando se pierde toda capacidad de inventar mundos posibles. Esto es como si los adultos no hubieran perdido lo infantil, sino que lo hubieran desarrollado en lugar de aniquilarlo. Uno mira esto y se dice ¿óia? ¿cómo no se me ocurrió a mí hacerlo?
Una belleza.
ResponderEliminarMuchas gracias, Big Nigger
Hermoso! El placer de sentirse libres! Muy fina esa puesta del ballet! Gracias por compartir!
ResponderEliminar¡Qué placer, Negro! El que inventó esto no sufrió la derrota que tiene la infancia frente a la cultura social, cuando se pierde toda capacidad de inventar mundos posibles. Esto es como si los adultos no hubieran perdido lo infantil, sino que lo hubieran desarrollado en lugar de aniquilarlo.
ResponderEliminarUno mira esto y se dice ¿óia? ¿cómo no se me ocurrió a mí hacerlo?