Páginas
▼
domingo, 27 de diciembre de 2015
viernes, 25 de diciembre de 2015
jueves, 24 de diciembre de 2015
miércoles, 23 de diciembre de 2015
¿Volverá F.U.C.K.? Cuenta la leyenda que en la antigua Inglaterra nadie podia tener sexo sin contar con el consentimiento del Rey, a menos que se tratara de miembros de la familia real. Y que cuando alguien quería tener un hijo debía solicitar un permiso al monarca, quien les entregaba una placa que debían colgar fuera de su puerta mientras tenían relaciones. La placa decia: "Fornication Under Consent of the King" (Fornicación bajo el consentimiento del Rey). ¡Pijisupá puré!
martes, 22 de diciembre de 2015
sábado, 19 de diciembre de 2015
miércoles, 16 de diciembre de 2015
ESTO ME LO CONTÓ LA QUERIDA COMPAÑERA TERESA PARODI:
En una escuela de la CABA, una señora correntina llevó a su hijo a anotarse como alumno. Al escuchar la tonada de ambos, la directora le dijo al niño -A ver, hijo, dime la palabra "barro". Y el niño dice "bayo"-
Entonces la directora le dijo a la madre que su hijo no podía ser aceptado por padecer de dislalia, un trastorno que se manifiesta por la dificultad de articular bien las palabras. Acto seguido la madre del niño le dijo a la directora: -Discúlpeme, señora, usted me podría decir "lluvia"?-
-Por supuesto, "yuvia"-. Y la madre le respondió: -¿Ve? Usted también padece de dislalia, señora-
Entonces la directora le dijo a la madre que su hijo no podía ser aceptado por padecer de dislalia, un trastorno que se manifiesta por la dificultad de articular bien las palabras. Acto seguido la madre del niño le dijo a la directora: -Discúlpeme, señora, usted me podría decir "lluvia"?-
-Por supuesto, "yuvia"-. Y la madre le respondió: -¿Ve? Usted también padece de dislalia, señora-
martes, 15 de diciembre de 2015
domingo, 13 de diciembre de 2015
Me permití hacer una reducción del largo poema de Sor Juana Inés de la Cruz, "Hombres necios que acusáis". Mis disculpas, Sor Juana. ChuiK!
Hombres necios que acusáis
a la mujer sin razón,
sin ver que sois la ocasión
de lo mismo que culpáis.
Combatís su resistencia
y luego con gravedad
decís que fue liviandad
lo que hizo la diligencia.
Mas entre el enfado y pena
que vuestro gusto refiere,
bien haya la que no os quiere
y queja enhorabuena.
Dan vuestras amantes penas
a sus libertades alas
y después de hacerlas malas
las queréis hallar muy buenas.
Bien con muchas armas fundo
que lidia vuestra arrogancia,
pues en promesa e instancia
juntáis diablo, carne y mundo.
a la mujer sin razón,
sin ver que sois la ocasión
de lo mismo que culpáis.
Combatís su resistencia
y luego con gravedad
decís que fue liviandad
lo que hizo la diligencia.
Mas entre el enfado y pena
que vuestro gusto refiere,
bien haya la que no os quiere
y queja enhorabuena.
Dan vuestras amantes penas
a sus libertades alas
y después de hacerlas malas
las queréis hallar muy buenas.
Bien con muchas armas fundo
que lidia vuestra arrogancia,
pues en promesa e instancia
juntáis diablo, carne y mundo.