El Comando Amelia es un comando de alumbrado, barrido y limpieza,
de acción pequeña pero contribuyente.
¡AMELIA VENCE!

viernes, 31 de enero de 2020

LA NEGRA MARÍA

Hace años, en una playa de Rio de Janeiro, vi a una hermosa mujer negra con vestido y turbante blanco sentada en el piso frente a una cacerola en la que juntaba monedas y billetes que algunos le dejaban. Me imaginé como sería su vida, que tal vez se llamase María, fuese amiga del mar, tuviese un rancho limpio, un marido viejo, muchos hijos, fuese una gran cocinera y tocase muy bien el berimbau. Así que le compuse una canción, “La Negra María”. Aquí acompañado por los “Sobrinos”.
http://www.fontova.com.ar/www.fontova.com.ar/discografia/canciones/fontovapresidente/09comotocamaria.mp3

domingo, 26 de enero de 2020

viernes, 10 de enero de 2020

REDES SOCIALES

LOS CISNEROS

domingo, 5 de enero de 2020

REYES

Era la noche del 6 de Enero. Y el asunto, para todos, era esperar los regalos que iban atraer los Reyes Magos.
Vivíamos en el centro, en Plaza Lavalle, y en aquellos años las tres plazas estaban rodeadas de mateos, unos carros de paseo hermosamente fileteados al mejor estilo porteño, cada uno de ellos tirado por un caballo. Y estos, en la espera, no podían más que hacer sus necesidades en el lugar.
Así es que mi vieja se ocupaba en secreto de recoger algunas muestras de bosta.
La noche anterior ya habíamos preparado baldes de agua y algunos bollos de pasto para que bebieran y comieran los camellos.
Al despertar, el living estaba colmado de regalos, baldes vacíos, restos de pasto. Y bosta. 
Así que no me cabía ninguna duda de que era la de los camellos que habían pasado por allí.
Pero en medio de los regalos había pequeños trozos de carbón. Y mi vieja decía que así los Reyes me recriminaban las travesuras que yo había cometido y que ella no tenía nada que ver.
Y como uno había hecho muchas tropelías, resultaba razonable. Pero no importaba, porque había multitud de regalos.
Y si íbamos a otro momento del año, ya lejos de la noche de Reyes -Agosto,digamos- un día, yo jugando con mi trompo después de haber cometido una de las mías, súbitamente sobre mi cabeza me caía un trozo de carbón. Un susto total.
Y muerto de miedo le decía a mi vieja: “¡Mamá, mirá lo que me cayó desde arriba!”. Y ella solo respondía: "¿Viste? no jodas, negrito."

sábado, 4 de enero de 2020

FINAL

La degradación de la historia en tres palabras es “sobrellevar-todo-a-disgusto,” es estar dispuesto a aceptar imposiciones sin reparar en las consecuencias. Sin importar a parecerse luego y para siempre a un caballo que ya no podrá galopar. Así es el resultado de la antigua, programada victoria del Gran Poder sobre la gran masa del pueblo, los innumerables desorientados, siempre recriminando al otro, sin escuchar respuestas. Se avecina el tiempo en que los dueños de las armas, de la guerra, los artífices de la última gran excursión sin regreso, quedarán dando vueltas, solos, con vagos vestigios de lo que fueron. Se va derrumbando el Gran Poder, pero ellos siguen, ni se quieren enterar. Sólo se empeñan en ser una postrera decoración histórica, una combinación de figuras incomprensibles. Pudieron pisar la luna, pero les espera la venganza de todos los elementos, y quedarán impresos como meros adornos. Serán las siluetas de la ornamentación final, debajo de sus escudos oscuros y pesados. 
Sin haber podido escuchar la risa de los montes desaparecidos, de los que se atrevieron a hablar, de los que casi no aparecieron en los informes de nadie. O la canción mensajera de algunos dioses que siguen luchando a mas no poder por los derechos del alma de otros pueblos del universo.

miércoles, 1 de enero de 2020

BRUJA

Va a arder la bruja en la hoguera, otra mañana en la que el fuego es obrero de la Santa Inquisición. En un palco, obispos y damas de hedores perfumados preparan sus pañuelos para taparse las narices, disimulando euforias y suspiros, ansiosos de dolor. Un millonésimo día más en la historia del mundo. 
El hermoso amanecer continúa ajeno a todo, la plaza ya está repleta y la gente no para de aullar, pidiendo a gritos que comience la función. Una más va a morir quemada. Se la acusa de haber cicatrizado heridas con la sola pasada de su mano y de haber curado mal de ojo mencionando al mismísimo Dios en sus plegarias paganas. Por todo eso, sus cenizas a los rastrojos, dice la habitual sentencia del tribunal. 
Con el exasperado bramido general se enciende la hoguera. Comienza el espectáculo. Pero la bruja no se agita ni grita de dolor, sino que comienza a entonar una hermosa canción que dice que los caminos que llevan al cielo no están clausurados por orden de nadie. Y la multitud indignada no para con el abucheo y las pedradas, porque la bruja sigue cantando entre las llamas.

domingo, 29 de diciembre de 2019

Me acuerdo que al querido Expreso Imaginario lo pudimos editar en el año 1976, al mismo tiempo que comenzaba el sangriento “Proceso de Reorganización Nacional” que hacía un tiempo ya se veía venir. A toda la banda "expresiana" nos ocupó el mismo problema que en este momento: el de derivar un horrible asunto hacia otro criterio, mas ingenioso y menos "infractor", pero contribuyente con el propósito de siempre: el de la libertad. Así es que comenzamos a hablar de otras cosas. Y la publicación, a pesar de que parecía algo ingenua, era de todas maneras vigilada por los milicos. Pero creo que éstos no consideraron peligrosas, o no comprendieron nunca la ecología, la poesía, la música, la ciencia ficción, las culturas originarias, la antimateria, mis dibujos y tantos otros temas del Expreso. Seguramente si lo hubieran hecho, en este momento no podría estar escribiéndoles esto.

Cuando comencé a arrancarme los dientes pensaba que iba a ser un tormento, pero no dolía demasiado y seguí. Faltaba sacar algunas muelas, era fácil. De una vez por todas quería verme como uno de esos gentiles animales como la anguila, que puede sentir que todo se desliza suavemente por su boca. Estaba harto de masticar. ¿Y por qué martirizar a trozos de animales supuestamente muertos cuando todavía no lo están? ¿Por qué no permitir que esos deliciosos pedazos de ser aún viviente sufran menos antes de empezar a deshacerse entre los ácidos de nuestros estómagos? Estoy seguro de que todo sigue vivo de alguna manera, por eso quise hacer una pequeña contribución en contra del dolor. Porque estoy seguro de que hasta las zanahorias sufren entre nuestros dientes.

Llegó el mejor momento del día, el del crepúsculo, el de tantos recuerdos. Más que ninguno el de todo viniéndose encima de uno, el de cuando mamá comenzaba a saltar en busca de comida. Cuando uno iba dentro de la bolsa calentita asomado, mirando hacia adelante. Ahora ya pasó el tiempo, pero los canguros nunca dejamos de salir todos juntos cuando cae el sol, a buscar algo para comer. Cuanto más rojo el horizonte, más hermoso.*

Soy un compañero renovado, viejo musiquero, un millennial biodegradable, me sobran gigabytes en el disco duro. Tomo decisiones en nanosegundos, no uso drogas, como verduras orgánicas y carne de vez en cuando. Soy un nigger del tipo alfa, de perfil bajo, me gustan el fútbol y el box, pero no soy hincha de ningún club. No uso celular ni estoy tatuado. Soy padrino de la Comuna 15 de La Cámpora y para salir a la calle cargo con pocas cosas: el DNI, la tarjeta de débito, la SUBE y algo de cambio. Intento hacer todo con mucha calma, a la noche tomo valeriana y unos tintos, duermo muy bien y cuando leo a los trolls me divierto muchísimo.

martes, 27 de noviembre de 2018

domingo, 28 de octubre de 2018

¿Ganó Bolsonaro?


martes, 25 de septiembre de 2018

lunes, 17 de septiembre de 2018

¡¡¡ #SLTACQQSVAA !!!

jueves, 30 de agosto de 2018

lunes, 27 de agosto de 2018

Les duele...


miércoles, 8 de agosto de 2018

miércoles, 20 de junio de 2018

Veo que algunos se alegran por el préstamo del FMI, otros resaltan que Argentina vuelve a ser mercado "emergente". ¿Estarán sintiendo tibiecita el agua?

EL SINDROME DE LA RANA HERVIDA
"Imaginate una cacerola llena de agua fría en la cual nada tranquilamente una pequeña ranita.
Un pequeño fuego se enciende bajo la cacerola, y el agua se calienta lentamente.
El agua despacio... despacio... se va poniendo tibia, y la ranita encuentra esto más bien agradable, y continúa nadando.
La temperatura del agua sigue subiendo...
Ahora el agua está caliente, más de lo que la ranita pueda gozar, se siente un poco cansada pero no obstante eso, no se asusta.
Ahora el agua está verdaderamente caliente y la ranita comienza a encontrar esto desagradable, pero está muy debilitada; entonces soporta y no hace nada.
La temperatura continúa subiendo, hasta cuando la ranita termina simplemente... cocinándose y muriendo.
Si la misma ranita hubiera sido metida directamente en el agua a 50 grados, con un golpe de sus patas inmediatamente habría saltado fuera de la cacerola.
Esto demuestra que, cuando un cambio viene de un modo suficientemente lento escapa a la conciencia, y no provoca en la mayor parte de los casos ninguna reacción, ninguna oposición, ninguna revuelta…" (Olivier Clerc s/Marty Rubin)

jueves, 7 de junio de 2018

#FMI


#FMI


domingo, 1 de abril de 2018